Si tienes sueño, no conduzcas

«La somnolencia se relaciona con los accidentes de tráfico hasta en un 30% de los casos y son aquellos que presentan una mayor mortalidad», apunta Joaquín Terán, director de la Unidad Multidisciplinar de Sueño Hospital Universitario de Burgos.

Muchos de estos accidentes se producen durante la jornada de trabajo, de hecho pueden llegar a alcanzar el 10% de la siniestralidad laboral vial, según apreciaciones del estudio desarrollado por la Asociación de especialistas en Prevención y Salud Laboral, con el patrocinio del Instituto Mapfre de Seguridad vial.

Al preguntarle al doctor Terán, que también es vicepresidente de la Sociedad Española de Sueño, por estos datos, este se muestra contundente: «Las jornadas de trabajo a destajo o a turnos poco organizados, que sobre todo aparecen en un contexto de crisis económica como el actual, no respetan que haya un descanso suficiente –y añade– por desgracia, no existe una legislación laboral que aborde el tema de los trastornos del sueño en el medio laboral».

El doctor refiere que, recientemente, se ha conocido el resultado de investigaciones sobre el trabajo a turnos prolongados de los médicos y la aparición de errores médicos o incluso de accidentes de tráfico y, en ambas situaciones, estas jornadas multiplican hasta por cuatro el riesgo de errores en la conducción de vehículos o siniestralidad ‘in itinere’.

Hay que planificar paradas en el itinerario del viaje para descansar cada dos horas.

Por otra parte, y teniendo en cuenta los próximos desplazamientos vacacionales, es importante saber qué se puede hacer para evitar la fatiga y la somnolencia
diurna en la conducción. Terán afirma que «desde el punto de vista preventivo, es necesario recordar que antes de iniciar un viaje es necesario dormir un número de horas apropiadas y planificar paradas en el itinerario para descansar aproximadamente cada dos horas».

El doctor especifica que los pacientes que presentan insomnios graves deben consultar con su médico de la Unidad de Sueño si son aptos para la conducción de vehículos.

En el caso de personas que sufren la apnea de sueño, «lo fundamental es cumplir el tratamiento nocturno o durante las horas de sueño con el respirador CPAP», indica Terán. A la vez, se recomienda cumplir de forma estricta con las horas de sueño y evitar el alcohol.

Microsueños

Son periodos muy cortos de sueño, causados por un cansancio extremo y que son los responsables de la mayor parte de ese porcentaje del 30% de los accidentes de tráfico. En casos de fatiga, hay que evitar el alcohol que multiplica los riesgos de accidente.

Tecnología

Actualmente, existen dos tipos de sistemas de detección de la fatiga del conductor, diferenciados según el tipo de datos que utilizan para establecer que la conducción se está realizando sin la concentración adecuada o bajo síntomas de somnolencia.

Diccionario del sueño

INSOMNIO. Es el trastorno de sueño más frecuente en la población y consiste en la dificultad de conciliar o de mantener el sueño. El 10% padece insomnio de forma crónica y un 30% de forma transitoria.

APNEA DEL SUEÑO. Se caracteriza por la presencia de pausas respiratorias de más de 10 segundos de duración, que provocan la alteración de la arquitectura del sueño y durante el día una somnolencia excesiva en distinto grado.

CPAP (CONTINUOUS POSITIVE AIRWAY PRESSURE). Es el tratamiento más habitual y recomendado para evitar la apneas del sueño. El dispositivo ejerce una presión de aire continua en las vías aéreas para evitar la obstrucción respiratoria.

ACCIDENTE IN ITINERE. Es el que le ocurre a un trabajador cuando el accidente se produce durante el desplazamiento desde su lugar de trabajo hasta su domicilio, y viceversa.

Consejos saludables

· Ventilar el vehículo. Es importante mantener una buena temperatura en su interior.

· Chicles y caramelos. Según diversos estudios, estas golosinas despiertan los sentidos y contribuyen a mejorar las capacidades de atención y percepción del conductor.

· Hablar con los acompañantes. No poner música relajante y, si es posible, turnarse en la conducción.

· Viajar de día. O, al menos, evitar desplazamientos entre las 2.00 y las 6.00 y las 13.00 y las 16.00, en las que el cuerpo se relaja y el riesgo de accidentes se multiplica.

· Evitar comidas copiosas. Para reducir el riesgo de somnolencia